No son imaginaciones tuyas. El herpes labial tiende a reaparecer en los peores momentos:
- Cuando se acerca la entrega de un proyecto que aún no has empezado.
- Justo después de pasar una gripe, para terminar de dejarte KO.
- En eventos importantes como una presentación en público, una entrevista de trabajo, o ¡tu boda!
No falla. ¿Y sabes por qué ocurre esto? O mejor aún, ¿sabes que puedes reducir las probabilidades de que este molesto acompañante se presente?
A continuación te contamos por qué el herpes labial rebrota siempre cuando menos lo necesitas y cómo puedes ponerle remedio antes de que aparezcan sus síntomas.
Esto último es fundamental, porque hablar de salud no consiste solo en hablar de dolores y síntomas. También consiste en promover hábitos que nos ayuden a prevenirlos y seguir disfrutando de una vida en equilibrio.
Es lo que en Labo’life llamamos “salud duradera”.
El estrés: el anfitrión perfecto del herpes labial
Los brotes de herpes labial suelen ocurrir cuando nuestro sistema inmunitario está despistado. Por ejemplo, cuando está luchando frente a otras infecciones o cuando su capacidad de defensa se ve reducida por algún motivo:
- Momentos puntuales de estrés.
- Cansancio crónico, ya sea físico o mental.
- Cambios hormonales (menstruación, adolescencia…).
- Tratamientos inmunosupresores, como la quimioterapia o cortisona.
Por eso, justo antes de un evento importante, es probable que la mezcla de expectativas, nervios y excitación previa disminuya tu capacidad de respuesta inmunitaria lo suficiente como para que el virus del herpes labial despierte de su estado latente.
Y ya no se trata solo de que tu cuerpo tenga que lidiar con el estrés, los nervios y la infección del virus al mismo tiempo. Que te salga un herpes labial en momentos tan importantes como el día de tu boda o una presentación en público arrastra muchos más problemas de los que se ven a simple vista:
Dolor y malestar
Estos son los efectos más evidentes: las úlceras y costras que genera el herpes son dolorosas. Especialmente las que salen en los labios, ya que tienden a supurar o sangrar cuando gesticulas, comes o sonríes.
¿Quién puede concentrarse o disfrutar del momento con semejantes molestias?
Vergüenza y culpa
Aunque se trata de un mito sin fundamento, mucha gente todavía cree que el herpes labial es una señal de dejadez o falta de higiene. Y la verdad es que, incluso sin ser así, a nivel visual provoca rechazo, sobre todo cuando las lesiones son de gran tamaño.
Por eso haces todo lo posible por ocultarlo: con maquillaje, con mascarillas o colocando tus manos sobre la boca para disimular. Pero por más que lo intentas, parece que los demás siempre acaban detectando la herida…
Miedo al contagio
Por último está el miedo al contagio que provoca este virus. Tanto el que sientes tú como el que sienten las personas que te rodean. Este miedo puede provocar que dejes de hacer planes con amigos o que los demás te eviten.
Por mucho que el herpes labial se presente en la fiesta, la realidad es que aumenta tu sensación de soledad.
Consigue que el herpes labial no te estropee la fiesta
Aunque ahora te parezca imposible, hay maneras de impedir que el herpes labial se presente en esos momentos importantes (o, al menos, reducir las probabilidades de que lo haga).
Y la estrategia más eficaz es muy simple:
No dejes que reciba la invitación
En otras palabras: no esperes a sufrir los síntomas.
La clave está en apoyar a tu sistema inmunitario para que se mantenga fuerte y equilibrado a diario. De esta forma podrá hacer frente al virus del herpes labial incluso durante una bajada de defensas.
Aquí te damos algunos consejos para mejorar tu capacidad inmunitaria:
- Cuida tu alimentación: mantener una dieta saludable y libre de alimentos ultraprocesados ayuda a promover un sistema inmunitario equilibrado y listo para responder cuando más lo necesitas.
- Realiza ejercicio: la práctica habitual de ejercicio de intensidad moderada fortalece las defensas. Deportes como el yoga o el tai-chi son buenos ejemplos de ello.
- Reduce el estrés: el cansancio crónico también agota a tu sistema inmunitario, disminuyendo su capacidad de respuesta. Si no puedes evitar las situaciones que te llevan a ese estado, apóyate en técnicas de meditación o relajación.
- Aprovecha la microinmunoterapia: un tratamiento que, usando su mismo lenguaje (citoquinas en dosis fisiológicas), le «recuerda» a tu sistema inmunitario cómo impedir que el herpes labial se reactive.
Gracias a estos métodos, la probabilidad de que el herpes labial aparezca en los momentos más inoportunos se reduce de forma considerable. Y si consigue rebrotar, lo hará con menos fuerza.
El herpes ya está en la puerta, ¿ahora qué?
En ese caso, empieza a tratar los síntomas en cuanto sientas ese temido hormigueo en los labios:
- Evita alimentos que irriten tus mucosas bucales, especialmente los ácidos (zumos de fruta o té) o muy secos (como bizcochos o galletas).
- Aplica miel o aceite de árbol de té, remedios caseros con características antisépticas y antimicrobianas que reducen la duración del brote.
- Si quieres ocultarlo, aplica primero un apósito específico para herpes labial antes de maquillarte para evitar que se extienda la infección.
- Utiliza antivirales (aciclovir y otros terminados en -ciclovir) solo en los casos más graves para evitar el desarrollo de resistencia a su principio activo.
- Prueba la microinmunoterapia. Además de preventivo, este tratamiento tiene el objetivo de reducir los síntomas del herpes labial y puede usarse en combinación con cualquier otro medicamento, antivirales incluidos.
La microinmunoterapia: el vigilante de la discoteca
Como ves, la microinmunoterapia te ayuda a mantener el herpes labial bajo control esté en la fase que esté.
En su fase activa, imita la respuesta que debería estar realizando tu sistema inmunitario, lo cual tiene un doble efecto: actúa sobre el virus y le muestra a tu sistema cómo comportarse en esas situaciones.
Durante la fase inactiva, refuerza la memoria de tus células inmunitarias para que aprendan a responder con eficacia cada vez que el herpes labial intente apuntarse al sarao.
¿Sufres más recidivas del herpes labial de lo que te gustaría? Quizás sea el momento de probar la microinmunoterapia. Si necesitas más información, sigue leyendo nuestro blog y pregunta a tu farmacéutico de confianza.