El deporte y la alimentación adaptados a las circunstancias de cada persona son la primera recomendación que nos da el médico ante la mayoría de problemas de salud. Incluso en algunas ocasiones como diabetes, hipertensión o hipercolesterolemia, son el primer escalón terapéutico que, si es eficaz, puede evitar la utilización de fármacos con el consiguiente ahorro económico y de efectos secundarios.

¿A qué es debido este efecto beneficioso del ejercicio sobre la salud? Cada vez más estudios declaran que se debe a que la actividad física moderada induce una tendencia antinflamatoria del sistema inmune.

¿Cómo afecta el deporte al sistema inmune?

Con la realización del ejercicio físico de manera regular se estimulan muchas vías que promueven un entorno antiinflamatorio. Las tres vías principales son:

  1. Pérdida de grasa. El aumento de tejido adiposo blanco es en sí mismo un factor de riesgo para el desarrollo de enfermedades con un componente inflamatorio crónico como diabetes, obesidad, dolor. Al disminuir este tejido adiposo se evita la infiltración de componentes inmunes inflamatorios como son macrófagos y células T.
  2. La secreción moderada de hormonas implicadas en situaciones de activación celular durante el ejercicio, como la adrenalina, cortisol, prolactina, somatotropina, etc., tiene efectos inmunomoduladores en el tráfico y funciones de los leucocitos y reducen citoquinas proinflamatorias.
  3. Con la contracción del músculo esquelético se producen miocinas que ejercen una acción beneficiosa sobre el metabolismo de los adipocitos o células grasas.

¿Ejercicio moderado o ejercicio intenso?

No siempre el nivel máximo de ejercicio es lo más adecuado. En este tema ocurre que los niveles extremos son perjudiciales; con una vida sedentaria puede aumentar el riesgo de demencia o deterioro cognitivo, pero en el otro extremo, realizando un ejercicio físico de alta intensidad y de larga duración, se pueden favorecer eventos cardiacos fatales como un infarto agudo o muerte súbita cardiaca. Se puede hablar por tanto de una “dosis de ejercicio” adecuada o, lo que es lo mismo, de practicar una actividad física moderada y frecuente, para conseguir los mejores resultados en salud.

¿Qué enfermedades se pueden prevenir realizando deporte?

El deporte ha demostrado tener importantes beneficios especialmente en:

  • Salud cardiometabólica, ya que con la actividad física se favorece la homeostasis de la insulina y se mejora la utilización de glucosa por parte del músculo esquelético. Mejora la composición corporal al disminuir la adiposidad y mejora también el funcionamiento mecánico del corazón de los vasos sanguíneos.
  • Salud respiratoria. Existe controversia sobre la mayor susceptibilidad de los atletas de alta competición a las infecciones respiratorias ya que existen estudios que ofrecen diferentes resultados. Pero cuando se trata de ejercicio físico moderado y adaptado a la capacidad de la persona, los estudios coinciden en que se produce una mejora de la salud respiratoria a consecuencia de una activación de la respuesta inmune como una mejora funcional del sistema respiratorio.
  • Salud del sistema nervioso. La práctica regular del ejercicio promueve la neuroplasticidad, neurogénesis y neuroprotección, contrarrestando el deterioro cognitivo relacionado con la edad, y mejora deficiencias neurológicas tras una lesión cerebral.

Tipo de deporte por grupo de población

La OMS ha dado unas orientaciones sobre cuál es el ejercicio más adecuado para cada grupo de población:

  1. Infancia. En los más pequeños es saludable que practiquen diferentes formas de movimiento para favorecer su crecimiento, desarrollo y aumentar sus habilidades de movimiento, por esto conviene no limitarles a la realización de un solo deporte.
  2. Niñez y adolescencia. En estas edades es recomendable hacer ejercicio vigoroso durante 60 minutos, 3 o más días a la semana. El aparato locomotor, músculos y huesos, debe reforzarse en continuo crecimiento. Es importante para prevenir factores de riesgo como la obesidad y aprender hábitos de vida saludables que les beneficiarán en la edad adulta.
  3. Adultos. El ejercicio moderado y en algún caso vigoroso puede beneficiar la salud en este grupo de población. De 2 a 5 horas extendidas a lo largo de la semana puede ser una buena recomendación. Debe valorarse la necesidad de realizar algún chequeo o seguimiento médico en caso de existencia de patologías, y el comienzo debe ser paulatino para ir aumentando la capacidad física de manera progresiva.
  4. Embarazo. Durante el embarazo es beneficioso realizar ejercicio físico porque mantiene o mejora la capacidad cardiorespiratoria de la madre, se evita el aumento de peso, la diabetes gestacional y la depresión postparto, si bien es cierto que no se debe empezar a hacer deporte si antes del embarazo no se hacía y, cuando se haga, no se deben superar las 140 pulsaciones/minuto.
  5. Adultos mayores. En estas personas hay que fomentar la actividad física adaptada a su condición ya que es frecuente que lleven una vida sedentaria. Ejercicios que favorezcan la fuerza muscular y el equilibrio son muy importantes para la prevención de las caídas.

Bibliografía

  1. Scheffer DDL, Latini A. Exercise-induced immune system response: Anti-inflammatory status on peripheral and central organs. Biochim Biophys Acta Mol Basis Dis. 2020 Oct 1;1866(10):165823. doi: 10.1016/j.bbadis.2020.165823. Epub 2020 Apr 29.
  2. Belanger MJ, Rao P, Robbins JM. Exercise, Physical Activity, and Cardiometabolic Health: Pathophysiologic Insights. Cardiol Rev. 2022 May-Jun 01;30(3):134-144. doi: 10.1097/CRD.0000000000000417.
  3. Sanz-Santiago V, Diez-Vega I, Santana-Sosa E, Lopez Nuevo C, Iturriaga Ramirez T, Vendrusculo FM, Donadio MVF, Villa Asensi JR, Pérez-Ruiz M. Effect of a combined exercise program on physical fitness, lung function, and quality of life in patients with controlled asthma and exercise symptoms: A randomized controlled trial. Pediatr Pulmonol. 2020 Jul;55(7):1608-1616. doi: 10.1002/ppul.24798. Epub 2020 Apr 30.

Deja tu comentario

Avisamos a los usuarios que al dejar un comentario en este blog se solicitan datos como un nombre que podrá ser de carácter público y por tanto visible por todos los usuarios. La dirección de correo electrónico no será publicada. El usuario que introduzca un comentario debe tener presente que sus publicaciones podrán ser conocidas por otros, por lo que DIMI S.L no se hace responsable de los contenidos que libremente haya publicado o compartido el usuario. Por la presente, el usuario mismo es el principal responsable de su privacidad. Para más información sobre nuestra política de protección de datos consulte nuestro Aviso legal.

¿Quieres seguir descubriendo tu sistema inmunitario?

Suscríbete a la newsletter trimestral y te contaremos todas las claves sobre tu sistema inmune: sus funciones, importancia y cómo cuidarlo.