Resaltamos unos extractos de un artículo de la Lda. Béatrice Lejeune sobre la aportación de la Micro-Inmunoterapia en el tratamiento de la artrosis, publicado en la revista para profesionales de la salud de la Asociación Española de Micro-Inmunoterapia “¡Nuevo Contact!” (Nº 7, otoño 2011).
Evolución de la artrosis
“Una característica propia del ser humano, además de su capacidad de pensar, es poder moverse por el espacio. Nuestros brazos, nuestras piernas, nuestra cabeza… todo se puede mover por nuestra simple voluntad. Los pilares que sostienen nuestros movimientos son nuestras articulaciones, uniones entre dos o más huesos. Estas articulaciones están formadas por un gran número de componentes (musculares, ligamentosos, etc.), pero también por una cápsula articular que protege el núcleo de la articulación: el cartílago que recubre la terminación ósea.
Con el paso de los años y los traumatismos sufridos (sinovitis a causa de golpes, tensión, sobrepeso, práctica intensiva del deporte, sin olvidar los factores genéticos), la articulación envejece. El cartílago que recubre el hueso se agrieta, va perdiendo pedazos minúsculos, se desmorona y acaba desapareciendo por zonas, dejando al descubierto el hueso subyacente”.
Los síntomas más comunes de la artrosis son el dolor y la hinchazón provocados por la inflamación de la zona afectada.
Artrosis y Sistema Inmunitario
El sistema inmunitario, como en otras enfermedades, juega un rol importante en la aparición y evolución de la artrosis:
“En el caso que nos ocupa, la artrosis, los macrófagos que se encuentran en la bolsa sinovial liberan principalmente interleucina 1 y TNFα, dos citoquinas que desencadenan el proceso de inflamación. […] El TNFα, por su parte, estimula la muerte controlada (apoptosis) de los condrocitos, los “ladrillos” del cartílago, que dejan de renovarse”.
Tratamientos
Existen numerosos tratamientos para la artrosis, pero, a menudo, van acompañados de efectos secundarios importantes. Sin embargo, con la Micro-Inmunoterapia, utilizando diluciones de diferentes mediadores inmunitarios implicados en la artrosis (principalmente TNFα e IL-1), se puede actuar sobre “las causas de la degeneración (muerte de los condrocitos y destrucción de la estructura cartilaginosa) y al mismo tiempo sobre sus consecuencias (inflamación y dolor)”, mandando el mensaje adecuado al sistema inmunitario, sin provocar efectos secundarios gracias a las dosis infinitesimales de los componentes de los medicamentos.
Los profesionales de la salud interesados en este tema podrán encontrar el artículo completo en la página www.3idi.org.